lunes, 25 de septiembre de 2017

ACERCA DE LAS ALMAS (parte 2)


El tema de una sola alma dividida en dos se puede encontrar en varias concepciones  culturales, pero permítaseme mostrar primero la explicación que diera el filósofo Platón en sus diálogos de El Banquete. Me gusta más esta concepción que otras porque no se detiene solamente en hablar de “la otra mitad” siendo una femenina y otra masculina, pueden haber “almas gemelas” solo femeninas o solo masculinas.

“En primer lugar, tres eran los sexos de los hombres, no dos como ahora, masculino y femenino, sino que había además un tercero que era común a esos dos, del cual perdura aún el nombre, aunque él mismo haya desaparecido. El andrógino, en efecto, era entonces una sola cosa en cuanto a figura y nombre, que participaba de uno y otro sexo, masculino y femenino, mientras que ahora no es sino un nombre que yace en la ignominia. En segundo lugar, la figura de cada individuo era por completo esférica, con la espalda y los costados en forma de círculo; tenía cuatro brazos e igual número de piernas que de brazos, y dos rostros sobre un cuello circular, iguales en todo; y una cabeza, una sola, sobre estos dos rostros, situados en direcciones opuestas, y también cuatro orejas, dos órganos sexuales y todo lo demás según puede uno imaginarse de acuerdo con lo descrito hasta aquí [...]
Eran tres los sexos y de tales características por la siguiente razón: lo masculino era en un principio descendiente del sol, lo femenino de la tierra, y lo que participaba de ambos de la luna, porque también la luna participa de lo uno y de lo otro. Y precisamente eran circulares ellos mismos y su manera de avanzar por ser semejantes a sus progenitores. Eran, pues, terribles por su fuerza y su vigor y tenían gran arrogancia, hasta el punto de que atentaron contra los dioses. [...]
Tras mucho pensarlo, al fin Zeus tuvo una idea y dijo:"Me parece que tengo una estratagema para que continúe habiendo hombres y dejen de ser insolentes, al hacerse más débiles. Ahora mismo voy a cortarlos en dos a cada uno [...]
Dicho esto, fue cortando a los hombres en dos [...] Así pues, una vez que la naturaleza de este ser quedó cortada en dos, cada parte echaba de menos a su mitad, y se reunía con ella, se rodeaban con sus brazos, se abrazaban la una a la otra, anhelando ser una sola naturaleza, y morían por hambre y por su absoluta inactividad, al no querer hacer nada los unos separados de los otros. Y cada vez que moría una de las mitades y sobrevivía la otra, la que sobrevivía buscaba otra y se abrazaba a ella, ya se tropezara con la mitad de una mujer entera —lo que precisamente llamamos ahora mujer—, ya con la mitad de un hombre; y de esta manera perecían. Mas se compadeció Zeus y se ingenió otro recurso: trasladó sus órganos genitales a la parte delantera (porque hasta entonces los tenían también por fuera, y engendraban y parían no los unos en los otros, sino en la tierra, como las cigarras).Los trasladó, pues, de esta manera a su parte delantera e hizo que por medio de ellos tuviera lugar la concepción en ellos mismos, a través de lo masculino en lo femenino, a fin de que, si en el abrazo se encontraba hombre con mujer, engendraran y siguiera existiendo la especie, mientras que si se encontraba hombre con hombre, hubiera al menos plenitud del contacto, descansaran, prestaran atención a sus labores y se ocuparan de las demás cosas de la vida.
Desde hace tanto tiempo, pues, es el amor de unos a otros innato en los hombres y aglutinador de la antigua naturaleza, y trata de hacer un solo individuo de dos y de curar la naturaleza humana. Cada uno de nosotros es, por tanto, una mitad de hombre, al haber quedado seccionados, como los lenguados, en dos de uno que éramos. Por eso busca continuamente cada uno su propia mitad. En consecuencia, cuantos hombres son sección del ser común que en aquel tiempo se llamaba andrógino, son aficionados a las mujeres, y la mayoría de los adúlteros proceden de este sexo; y, a su vez, cuantas mujeres son aficionadas a los hombres y adúlteras proceden también de este sexo. Pero cuantas mujeres son sección de mujer, no prestan mucha atención a los hombres sino que se interesan más bien por las mujeres, y las lesbianas proceden de este sexo. En cambio, cuantos son sección de varón, persiguen a los varones, y, mientras son niños, como son rodajitas de varón, aman a los hombres y disfrutan estando acostados y abrazados con los hombres, y son éstos los mejores de los niños y muchachos, por ser los más viriles por naturaleza. Hay quienes, en cambio, afirman que son unos desvergonzados, pero se equivocan, pues no hacen esto por desvergüenza, sino por audacia, hombría y virilidad, porque desean abrazarse a lo que es semejante a ellos. [...]
Así pues, cuando se tropiezan con aquella verdadera mitad de sí mismos, [...] entonces sienten un maravilloso impacto de amistad, de afinidad y de amor, de manera que no están dispuestos, por así decirlo, a separarse uno de otro ni siquiera un instante. Y los que pasan la vida entera en mutua compañía son éstos, que ni siquiera sabrían decir lo que quieren obtener uno de otro. Nadie, en efecto, podría creer que lo que pretenden es la unión en los placeres sexuales, y que es ése precisamente el motivo por el que el uno se complace en la compañía del otro con tan gran empeño. Al contrario, el alma de cada uno es evidente que desea otra cosa que no puede decir con palabras, sino que adivina lo que desea y lo expresa enigmáticamente. [...]
Pues la causa de esto es que nuestra antigua naturaleza era ésa que se ha dicho y éramos un todo; en consecuencia, el anhelo y la persecución de ese todo recibe el nombre de AMOR.”

¿Les ha hecho pensar? A mí también. Tal vez con imágenes imaginativas y poéticas, pero algo de verdad hay detrás de este mito del andrógino, como detrás de cada mito antiguo.

Y bueno, también los Kaulitz dicen a cada rato que son “almas gemelas”, pero por lo que dijeron en el Talk Show, más bien lo que ellos refieren es que son “llamas gemelas”.

Muchas veces las personas confunden a las almas gemelas (almas compañeras) con las llamas gemelas. Las almas compañeras, según el esoterismo, son aquellas que han reencarnado varias veces juntos en sus distintas vidas; podrían ser muy amigos, familiares, o una pareja romántica donde todo parece darse muy fácil y todo fluye. Cuando alguien se casa o decide vivir la vida junto a su alma compañera, normalmente vive feliz y sin demasiados tropiezos. Pero esa no es su LLAMA GEMELA.  Muchas de las veces en que la gente habla de las parejas del alma, en realidad están hablando de las Llamas gemelas, ya que existe solo 1 Llama Gemela para cada uno de nosotros: esta es verdaderamente nuestra otra mitad, la Otra Parte de una misma alma dividida en dos desde la creación. O sea, no son dos almas que se encuentran y se unen, sino la misma alma dividida en 2 cuerpos —que fue lo que dio a entender Bill y Tom asintió a ello—.

La energía entre dos llamas gemelas puede ser tan intensa que resulte realmente abrumadora. El amor con una llama gemela puede ser algo sin comparación, y también se pueden herir uno al otro profundamente. Muchas de estas relaciones son feroces y breves, aunque realmente memorables, pero su vínculo es eterno, y se volverán a encontrar una y otra vez en otras vidas, ya que no solo son almas compañeras sino también llamas gemelas. Con una llama gemela uno siente que nunca se desconecta. Las almas compañeras son de una relación casi perfecta, pero las llamas gemelas, NO son la pareja ideal, ya que generalmente implican alguna forma de caos. Pero entre estas almas existe un vínculo directo e intenso, tan intenso que nunca se puede cortar, inclusive si nunca llegan a formar una pareja física. Una vez que se han visto, desde la primera mirada, sentirán que nunca  más estarán completos sino se unen al otro. Su atracción es inmensa e inevitable, y pasará por encima de convenciones sociales, culturales y legales para estar juntos. Uno puede sentir qué es lo que el otro siente cuando se separan. Y se pueden sentir espiritualmente cerca, aún cuando exista negatividad y distancia de por medio, y por eso su relación puede resultar tan bella como traumática.

Supongo que a eso se refieren justamente los Kaulitz cuando hablan de no poder estar separados, de sentir lo que el otro siente, de no tener secretos uno con el otro, a que son “llamas gemelas”, y a veces es tan evidente que uno de los invitados al Talk Show no puedo evitar decir: “Ustedes parecen una vieja pareja de casados”, a lo que ellos solo pudieron reír... ¿Risa nerviosa, tal vez, por verse descubiertos? Además, dicen que quien calla, otorga, y ellos no negaron para nada parecer “una vieja pareja de casados”, más bien Tom lo reafirmó cuando se volvió a Bill y le dijo “lindo”.


(Créditos y agradecimientos a quien hizo la traducción de lo que dicen al inglés, y a quien la hizo al español, que no fui yo)


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